DOLOR DE ESPALDA
El dolor de espalda, y en concreto el que el paciente refiere localizado en la zona de los riñones o lumbar (lumbalgia), es una de las causas de consulta más frecuente. A la sobrecarga muscular de levantar peso se añade el movimiento del barco (balanceo, cabeceo, golpes violentos). El modo erróneo de levantar y transportar grandes pesos con la columna vertebral doblada favorece la aparición de esta patología, (ver Capítulo 13.1, HIGIENE DE LA POSTURA).
En el caso concreto del dolor lumbar, el origen puede estar en la propia columna vertebral y sus estructuras (ligamentos, músculos, nervios, disco intervertebral, etc.) o bien ser debido a enfermedades cuyos síntomas se reflejan en esta zona, entre las que destacan las del riñón y vías urinarias.
El dolor de espalda simple, de origen osteo-muscular, suele ser de comienzo súbito; puede seguir a un período de intenso trabajo o algún movimiento brusco de la espalda, pero puede aparecer sin motivo evidente. Puede variar desde un dolor sordo hasta muy intenso que produce incapacidad. Siempre hay cierto grado de espasmo de los músculos de la espalda, que aumenta con el movimiento.
La mayoría de los casos se resuelven con tratamiento en días. Será importante el reposo en cama durante dos días como mínimo, en la postura en la que se tenga menos dolor, generalmente con las caderas flexionadas (ver figura 8-3). Analgésicos-antiinflamatorios como ácido acetil salicílico (500 mg. cada 6-8 horas) o paracetamol (500 mg. Cada 6 horas) (CAJÓN 3, Botiquines A, B, C y BALSAS) si hay antecedentes de úlcera, y la aplicación de calor local por medio de una bolsa de agua caliente, que contribuirá a aliviar el dolor y el espasmo muscular.
Si el dolor continúa, solicitar CONSEJO MÉDICO POR RADIO.
Figura 8-3: Posición de descanso en el dolor de espalda.