DIARREA
La diarrea se define como un aumento anormal de la cantidad, frecuencia o fluidez de las deposiciones intestinales. La diarrea no es una enfermedad, sino un síntoma de alteración del paso intestinal.
Hay muchas causas diferentes de diarrea; pueden ser infecciosas (virus, bacterias o parásitos) o no infecciosas (intoxicación por metales, alergias a ciertos alimentos o trastornos emocionales).
En la diarrea, el movimiento de los intestinos está acelerado y las heces son blandas o semisólidas, pero pueden hacerse acuosas, posiblemente espumosas, y pueden tener muy mal olor. La pérdida de líquidos, por las heces acuosas y abundantes, puede causar grave deshidratación. Cuando la diarrea es muy intensa puede producirse shock, colapso y muerte; ello obedece a la pérdida de agua y sales del organismo. La deshidratación grave puede aparecer muy rápidamente.
El principio fundamental en el tratamiento de una diarrea es reponer el agua y las sales perdidas: esto puede hacerse, en la mayor parte de los casos, por vía oral. Las sales de rehidratación oral están envasadas en saquitos o bolsas de aluminio (CAJÓN 13, Botiquines A y B) que deben disolverse en agua. Si no se dispone de las sales de rehidratación oral puede obtenerse una solución apropiada mezclando 4 cucharadas de azúcar, media cucharadita rasa de sal y media de bicarbonato, junto con el zumo de uno o dos limones en 1 litro de agua. La solución debe darse primero rápidamente y luego en pequeñas cantidades, un vaso (200 ml.) después de cada deposición, para reponer las continuas pérdidas.
En caso de que el paciente no pueda beber, una alternativa es la administración de líquidos por vía intravenosa (solución de cloruro sódico al 0,9%, CAJÓN 13, Botiquines A y B), previo CONSEJO MÉDICO POR RADIO.
Como regla general, en las diarreas agudas los antibióticos no deben usarse y, además, pueden ser contraproducentes.
El paciente debe guardar cama y estar lo más cómodo posible. Tan pronto como sienta apetito se le dará una dieta astringente y blanda, (ver ANEXO 5) que incluya bebidas (no alcohólicas) y caldos que contengan sal.
Si hubiera fiebre, sangre o pus en las heces, riesgo de padecer paludismo o el trastorno no se solucionara en 48 horas, solicitar CONSEJO MÉDICO POR RADIO.